Sialorrea es la excesiva producción de saliva. Se sugiere definirlo como una exacerbación del reflejo esófago-salivar.
La saliva se produce en la boca por tres principales glándulas salivales: la glándula parótida, la glándula submandibular y la glándula sublingual. También la fabrican una serie de pequeñas glándulas. La cantidad de saliva que se produce se ve afectada por varios factores diferentes, y cuando la saliva se produce mucho más de lo necesario, puede resultar en babeo. Es particularmente notable cuando la producción excesiva de saliva se acompaña de alteración de la deglución.
La hipersalivación puede producirse a partir de una estimulación parasimpática excesiva. Suele considerarse un signo orientativo de una enfermedad del tracto gastrointestinal superior. En niños la causa más frecuente es el crecimiento dentario. Es frecuente también durante el embarazo.
Es un clásico efecto secundario de fármacos colinérgicos muscarínicos o quimioterápicos como el cisplatino.
Sin que haya ninguna patología la sialorrea es normal en los niños en la etapa de la erupción dental y también durante el embarazo.
Las intoxicaciones por mercurio, yodo o plomo también puede provocarla. La uremia.
El hipertiroidismo y el pseudohiperparatiroidismo
La pilocarpina, los yoduros y la L-Dopa.
La ptialomanía (ansiedad).
La Enfermedad de Riley-Day que cursa con transpiración excesiva, sialorrea, erupciones cutáneas y labilidad emocional.