Los ojos saltones o exoftalmos corresponden a una protrusión (prominencia) anormal de uno o de ambos ojos. Los ojos prominentes pueden ser un rasgo familiar. Sin embargo, los ojos prominentes no es lo mismo que ojos saltones, que deben ser revisados de inmediato por el médico. La protrusión de un solo ojo, en especial en un niño, es un signo importante que necesita una evaluación médica lo mas rápido posible.
El hipertiroidismo (particularmente la enfermedad de Graves) es la causa más frecuente de los ojos saltones. Con esta afección, los ojos no parpadean muy a menudo y parecen estar fijos.
Generalmente, no debe haber porción blanca visible entre la parte superior del iris (parte coloreada del ojo) y el párpado superior. El hecho de observar parte blanca en esta área normalmente es un signo de que hay protrusión del ojo. Debido a que los cambios oculares se producen muy lentamente, es posible que los miembros de la familia no se percaten de ellos hasta que la enfermedad esté relativamente avanzada. Las fotografías con frecuencia despiertan la atención hacia la protrusión cuando esto ha pasado inadvertido antes.