Hacerlo o no hacerlo. Esa es la cuestión que se plantean muchos jóvenes. Pero hay cosas importantes que hay tener muy claras antes de iniciarse.
Las relaciones sexuales son un típico caso de "ensayo y error" hasta llegar al dominio de la técnica. También la observación puede ayudar bastante ya que el hombre es un ser que imita mucho por su naturaleza animal, sumada al instinto por supuesto.
Antes de iniciarse en las relaciones sexuales hay que estar preparado o preparada. A veces es diferente pensar que estamos preparados y en realidad no lo estamos. La primera experiencia debe ser afortunada: una vez que la has tenido, no existe vuelta atrás. Por ello hay que actuar de forma inteligente y tener las cosas claras antes de iniciarse. El problema de la primera vez no es hacer bien el amor: siempre las próximas veces será mejor ya que el aprendizaje y la experiencia te darán alegrías futuras en el sexo.
El sexo es una forma física de expresar amor y cariño hacia alguien. Tener una relación sexual puede ser gratificante y divertido, pero es muy importante recordar lo siguiente: infórmate bien con personas adultas de tu confianza, no tengas miedo a preguntar todo lo que necesites saber o que te plantee una duda. Es importante conocer tu cuerpo y los riesgos a los que te enfrentas antes de iniciarte.
Estar relajado y tranquilo. Se aconseja que esta primera experiencia esté bien planeada, aunque en muchos casos no ocurre así. Habla con tu pareja y, sobretodo, no te precipites. Si en algún momento piensas que no lo ves claro es mejor no continuar. Habrán otras muchas ocasiones. Tómate todo el tiempo que necesites, no ha lugar a la precipitación.
Las dos personas tienen que que estar de acuerdo en mantener relaciones sexuales. Utiliza métodos de anticoncepción para prevenir posibles embarazos y de prevención de transmisión de ETS (enfermedades sexualmente transmisibles). Nunca te veas forzado o forzada a mantener relaciones sexuales, tampoco debes presionar a la otra persona a aceptar.
Siempre, en cualquier momento, puedes decir no. Puedes cambiar tu decisión en cualquier momento: hay que saber decir no. Nadie tiene derecho a acosarte ni a obligarte a tener relaciones sexuales contra tu voluntad: el acoso sexual es un delito, castigado por la Ley.
No existe una edad precisa aunque la tendencia actual es a iniciarse cada vez más jóvenes (incluso entre los 13 y los 15 años). Es importante tener la madurez necesaria y estar seguro de que es tu momento ideal. La persona que has escogido debe ser la apropiada para ti.
Lo mejor es informarte sobre los métodos anticonceptivos y de protección (como el uso del condón), cómo funciona el cuerpo humano, por ejemplo, sobre los órganos sexuales y su funcionamiento, así como el proceso de concepción y embarazo. Esto con la finalidad de estar preparado y saber cómo evitar las enfermedades de transmisión sexual y embarazos no planeados.
La virginidad: será una experiencia única en tu vida, no hay que banalizar esta "pérdida". La mayoría de los jóvenes llegan vírgenes a la educación superior. Algunos adolescentes presumen de sus experiencias cuando en realidad o no las han tenido o las mismas han dejado bastante que desear. Esta situación provoca que otros muchos adolescentes vírgenes se sientan como "bichos raros" cuando, en realidad, pertenecen a la gran mayoría.
Perder la virginidad nunca debe suponer un "puro trámite" que hay que pasar ya que habitualmente es una experiencia única en la vida y no se debe infravalorar. Hay que reflexionar sobre el cuando, el con quién y el cómo.
Hay que preguntarse: ¿es amor o puro deseo? y ¿es presión o confianza? La situación puede llevarte a precipitarte. La única defensa es ser sincero contigo mismo a la hora de preguntarte por qué deseas tener sexo.
Protegerse para evitar embarazos no planeados: no es únicamente un "problema de chicas", los chicos deben preocuparse tanto como las chicas de tomar medidas para protegerse de un embarazo no planeado. Usar siempre condón es responsabilidad de ambos, así como los métodos anticonceptivos.
Protegerse de las enfermedades de transmisión sexual. Los jóvenes, en general, es en la última cosa en la que piensan y sin embargo, es la primera cosa por la que hay que preocuparse. Antes de la primera relación este tema debes tenerlo cubierto si ningún riesgo, de lo contrario puedes incurrir en un error fatal.
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