Síntomas
Numerosos síntomas, algunos menores y comunes a muchas enfermedades, pueden llevar a detectar el cáncer de hígado:
- Dolores abdominales.
- Fiebre.
- Aumento de volumen abdominal.
- Adelgazamiento, malestar general, fatiga...
- Vómitos.
- Ictericia (amarillez de la piel).
- Presencia de líquido en la cavidad abdominal (ascitis)...
Detección por casualidad
- Durante una ecografía realizada en un chequeo médico.
- Durante el control de una cirrosis.
- Durante el chequeo de otro cáncer.
Cirrosis y cáncer de hígado
La cirrosis puede evolucionar hasta convertirse en un cáncer de hígado.
La cirrosis es la mayoría de veces la enfermedad a partir de la cual se desarrolla un cáncer de hígado.
Las causas más frecuentes de cirrosis
- El consumo de alcohol es la primera causa de cirrosis.
- Infecciones de hígado, hepatitis B y hepatitis C crónica.
Factores de riesgo del cáncer de hígado
- La cirrosis, vinculada al consumo en exceso de alcohol o a los virus de las hepatitis B y C.
- Tener más de 50 años de edad.
- Ser del sexo masculino.
- Algunas enfermedades como la hemocromatosis, que es la sobrecarga de hierro.
- La obesidad.
Detección de cáncer de hígado
En el caso de las personas que padecen enfermedades crónicas del hígado, es necesario realizar una ecografía hepática y un control constante de los niveles de alfafetoproteína, marcador tumoral del hígado y molécula presente en la sangre, para detectar el cáncer y controlar la eficacia del tratamiento.
El diagnóstico
El escáner y la resonancia magnética son los dos principales exámenes que permiten diagnosticar un cáncer de hígado.
El análisis de alfafetoproteína (AFP). La tasa de AFP puede aumentar pero no sistemáticamente.
Los exámenes a realizar para detectar la metástasis
El médico podría ordenar un escáner cerebral, una radiografía torácica y una gammagrafía ósea.
Publicado por
Carlos-vialfa.
Última actualización: 25 de octubre de 2016 a las 15:03 por Carlos-vialfa.