La persona afectada y las personas de su entorno deben recibir un tratamiento contra la sarna. También se debe desinfectar sus objetos personales como la ropa de cama y sus prendas de vestir.
El paciente debe recibir un tratamiento al igual que las personas de su entorno, incluso si no presentan ningún síntoma.
Lavar las prendas de vestir y las ropas de cama a 60 °C. Para prevenir una reinfección se debe desinfectar las prendas de vestir y la ropa interior del paciente con un tratamiento local antiparasitario. Después se debe desinfectar los zapatos, los colchones, los sillones...
Existen tratamientos locales y tratamientos con fármacos por vía oral. Se disponen de cremas y lociones para aplicarse de forma local y se utilizan de diferentes maneras.
Uno de los compuestos más conocidos es el benzoato de bencilo (Ascabiol®) en loción que se utiliza en un única aplicación después de haber tomado un baño completo. Enseguida es necesario aplicar a todo el cuerpo, desde la cabeza (incluido el cuero cabelludo) hasta los pies, y dejarlo reposar durante 24 horas antes de enjuagarse.
También es eficaz la crema de permetrina. Los picores mejoran con el tratamiento pero todavía pueden seguir varios días después. Consultar con su médico o farmacéutico.
La ivermectina oral es prescrita en una sola toma. Se recomienda este tratamiento en personas que no pueden tolerar el tratamiento local. Este tratamiento no es recomendable en niños con un peso inferior a 15 kilos.
Los antibióticos son prescritos en caso de infección de las heridas.
Será necesario volver a evaluar al paciente (recaída, resistencia al tratamiento...) o buscar alguna otra causa.
Escabiosis o sarna
de la sarna
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