El angioma hepático es un tumor benigno del hígado que se desarrolla a partir de los vasos sanguíneos. En general, cuando están presentes son asintomáticos. Su presencia se detecta durante un examen que se realiza por otro motivo, ya sea un escáner o un ultrasonido. Si la angioma hepático es pequeño, permanecerá bajo observación sin tratamiento ya que las lesiones y las complicaciones son poco frecuentes. Si el angioma es grande o crece rapidamente, puede ser analizado por una punción y se puede extirpar quirúrgicamente si es necesario.