La crisis ha aumentado un 10% las consultas por problemas del sueño
En el contexto actual de crisis económica, el insomnio es un mal añadido. El sueño es uno de los indicadores más sensibles de las perturbaciones que afectan a las personas. La actual situación de crisis económica ha impactado en el sueño de muchas personas, una influencia negativa que se puede aprender a controlar.
Los problemas de insomnio, aunque sea de forma transitoria, afectarán a toda la población en algún momento de su vida.
El problema del estrés
- El insomnio es considerado crónico cuando dura más de cuatro semanas.
- Aunque el insomnio es más frecuente entre las mujeres en la situación actual los hombres se ven más afectados debido a la estructura social vigente en la que el varón es el cabeza de familia del hogar.
- Se ha detectado estos últimos meses un aumento de los casos de insomnio producidos por situaciones de ansiedad y depresión.
- Colectivos más afectados: los parados, las personas que tienen miedo de perder su trabajo, los empresarios que deben tomar decisiones "dolorosas" con sus trabajadores y los ejecutivos sobretidos a mucha presión laboral.
Origen del insomnio
- La mayoría de los casos de insomnio tiene su origen en causas psicofisiológicas.
- El sueño aparece cuando determinadas zonas del cerebro se desconectan de la actividad que mantienen durante el día. Todo lo que hacemos durante el día nos afecta por la noche.
- En las personas estresadas, las estructuras permanecen activadas hasta el momento de meterse en la cama y no consiguen conciliar el sueño. La consecuencia es un abuso del consumo de fármacos para dormir.
- La falta de sueño crónico influye en el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, hipertensión o diabetes y aumenta las posibilidades de sufrir una depresión.
Tipos de insomnio
El insomnio se puede manifestar de varias maneras:
- Como un sueño no reparador.
- Falta de horas de sueño, sueño corto.
- Dificultades a la hora de conciliar el sueño.
Tratamiento
- La automedicación en estos casos es peligrosa.
- El tratamiento farmacológico unicamente es recomendable si la falta de sueño se debe a problemas de ansiedad o depresión. Siempre debe realizarse con indicación médica.
- Si es un insomnio psicofisiológico se deben introducir cambios en los hábitos de vida para que el paciente aprenda a relajarse. Así se aconseja no ver la televisión, ni conectar el ordenador o planear actividades relacionadas con el trabajo una hora antes de acostarse porque el sueño "no se puede forzar".
- Apliquemos unas pautas tan simples como iniciar la desconexión tres horas antes de irse a la cama, no llevarse trabajo a casa y desconectar el ordenador y el móvil.
- Se deben priorizar las terapias cognitivas en varias sesiones como alternativa para solucionar el problema.
- Entre el 60 y el 70% de las personas resuelve su problema de esta manera, sin necesidad de recurrir a los medicamentos; un 20% requiere fármacos y en solo un 5% "es francamente difícil" combatir el insomnio, generalmente porque el paciente no es consciente de las causas reales de su problema o porque está deprimido.
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