La mialgia es un dolor que afecta a los músculos esqueléticos estriados, es decir, los músculos que están bajo el control del sistema nervioso central, de control voluntario. Se trata básicamente de los músculos del cuello, los músculos que se localizan a lo largo de la columna vertebral, los músculos de las extremidades superiores e inferiores y los del tronco. Las causas de mialgias pueden ser múltiples: una contusión, un traumatismo, un falso movimiento que provoque una tortícolis o un lumbago o ciertas enfermedades como la gripe , la hepatitis, la poliomielitis y otras enfermedades neurológicas.
Los síntomas de mialgias son la definición misma de la palabra: se trata de dolores musculares. La búsqueda de las diferentes características de los dolores permitirá orientar al médico hacia una de las posibles causas.El dolor puede ser:
El diagnóstico de la mialgia es fácil de detectar: el paciente muestra el área que le duele y el exámen clínico puede poner en evidencia este dolor o éste puede seguir siendo subjetivo. Diferentes exámenes se pueden realizar para buscar el origen del dolor, especialmente la ecografía que permite poner en evidencia a veces un hematoma, una elongación o un desgarro de ciertas fibras musculares. Un análisis de sangre puede mostrar las CPK (creatinina fosfoquinasa) aumentada en algunos casos.
Existen tantos tratamientos como causas de mialgias. La identificación y el tratamiento de la causa generalmente permite una desaparición de los dolores. En cuanto a las mialgias de aparición traumática, se debe aplicar hielo sobre la zona dolorida, sobreelevar el músculo afectado y colocar un vendaje ligeramente comprimido con una venda. En caso de dolores fuertes y persistentes se recomienda tomar analagésicos y medicinas que relajen el músculo (llamados relajantes musculares). También se recomienda reposo.