No se puede tener buena relación con los demás sin tener buena relación con tu espejo, con la imagen que tienes de ti mismo
- Una sociedad llena de espejos: en el baño, en los escaparates, en la pantalla del televisor cuando está apagado...
- De las relaciones que establecemos con los espejos y de cómo esas representaciones pueden volverse nocivas, es de lo que trata 'El Síndrome del Espejo', la última publicación de Jesús de la Gándara, psiquiatra, escritor y poeta, contento con su profesión y con la imagen que ofrece su espejo.
¿Quién fue el primero que se miró al espejo?
- El primero que fue capaz de decir este soy yo: eso es la evolución de la conciencia humana.
- Es lo mismo que le pasa al niño de dos años que poco a poco va descubriendo que ese que está en el espejo es él: el espejo es la autoconciencia.
¿Qué es el síndrome del espejo?
- Todos los sufrimientos y enfermedades que causa la distorsión de la imagen que yo tengo de mí mismo contra la imagen pública, la aprobación o la crítica, de mí mismo.
El origen de ese síndrome ¿está en un exceso de espejos?
- Está en un exceso del deseo: la generación de deseos es uno de los grandes trucos de la humanidad.
- Lo superlativo del deseo, que aparece fundamentalmente con la producción de bienes (con la revolución industrial y especialmente tras la Segunda Guerra Mundial con la abundancia de cosas y opciones al alcance de todos), es cuando se genera una sociedad 'hiperoréxica', mucha glotonería de todo.
- La consecuencia de todo eso es la crisis: esa 'orexia', llevada a la desmesura, genera enfermedades porque nunca es posible satisfacerla toda y entonces viene la inadaptación o la frustración.
- Por eso es importante no hacer lo que digan los demás, el placer depende de lo que tú controles de ti mismo.
- Es importante que cuando tú te mires en el espejo hables contigo mismo, que te apruebes como apruebas a los demás con empatía, con generosidad...
Quizás cada vez hablamos menos con los demás y con nosotros mismos ¿no?
- Sí, por lo tanto, los juicios los hacemos más rápido y creemos cosas de nosotros mismos que a lo mejor no las creemos, porque eso requiere reflexión y eso es mirarse en un espejo.
- Estamos en una sociedad llena de espejos, nos miramos en ellos, pero no dialogamos.
- Lo que deberíamos hacer es hablar con ese tipo, preguntarle, todos los días un poquito, ya verás como encuentras por qué te sientes mal, qué ha pasado.
- Una vez que lo encuentres, hay que tratar de corregirlo y de aprender porque la compasión contigo mismo no tiene por qué ser pasividad.
- La autocrítica no tiene que ser destructiva, y es necesaria para aprender.
¿Suele haber mucha distancia entre lo que vemos y nuestra imagen real?
- Normalmente, no: la mayoría de personas es bastante sana en este sentido, pero cuando hay mucha distancia entre el concepto de ti mismo y lo que ves, hay una distorsión de la imagen corporal, es decir, la imagen corporal.
- Cuanta más distorsión, más problema: es lo que les pasa a las personas anoréxicas, a las vigoréxicas, etc. Por tanto, hay que procurar que tu imagen real y tu imagen especular sean lo más parecidas. Y para eso hay que amarse y amar a los demás.
¿Qué papel tiene la familia en esta relación?
- Cardinal: la familia nos va metiendo la imagen de nosotros mismos, nos la va fortaleciendo desde muy pequeños, positiva y negativamente.
- Decía Pedro Laín Entralgo hace millones de años cuando no había neurobiología que los abrazos y besos de una madre son la mejor vitamina para un niño.
- La familia va confirmando al niño en su seguridad en sí mismo, y eso tiene que ver con la reflexión psicológica y con la física.
- No se puede tener físico y psíquico por separado.
¿Qué son las neuronas espejo?
- Son unas neuronas que tenemos todos los seres humanos, que están fundamentalmente en el área parietal, que reconocen escenas y las imitan.
- Si muevo una mano, tu cerebro, sin tú moverla, está imitando y reproduciendo el mismo esquema.
- Gracias a ellas reconocemos a los demás y se establece una teoría de la mente, es decir, aprendo de los otros, los reconozco empáticamente como otros.
- La propuesta es si utilizo esas neuronas espejos para juzgar a los otros y comprenderlos, y normalmente las utilizamos positivamente, por qué no hacer lo mismo con lo que ves en el espejo.
- Si empatizas contigo mismo, mejoras tu autoestima, te estás dando un chute de dopamina: y esto se podría hacer si tienes un espejo y hablas y empatizas contigo.
¿Qué les pasa a las neuronas de las anoréxicas?
- La gente que se percibe mal en el espejo, no se perciben a sí mismos, perciben una parte solo.
- El mayor error de las anoréxicas no es que digan 'qué fea estoy' es que dicen 'vaya mierda de barriga tengo' : sólo ven un cachito, no lo integran en un modelo.
- Sin embargo, si lo miras globalmente puedes decir 'no soy guapo, pero soy resultón', por ejemplo.
¿Cómo se puede reconvertir esa imagen?
- Con tratamientos farmacológicos, que hacen que aumenten ciertas sustancias en el cerebro, y tratamientos psicológicos que generen nuevas rutas de información en el cerebro, nuevas neuronas, porque las palabras van al cerebro, no van por ahí.
- Generamos nuevos circuitos más saludables y así, con tiempo y tiempo, muchas personas logran cambiar eso.
- Las soluciones también pasan por la sabiduría, la mesura, la bondad, lo saludable...
- Lo que falla esencialmente en el ser humano es la constancia. Un ejemplo: muchas personas me vienen a la consulta con un problema y no quieren tomar pastillas sino hacer psicoterapia. Y siempre les digo: '¿sabes lo que significa? Que yo le hablo, usted se lleva trabajo para casa y el que trabaja es usted'. Indefectiblemente, al cabo de dos o tres consultas, me piden las pastillas. Porque es más fácil cambiar de bote [de pastillas] que cambiar de costumbres.
¿Pero se puede hacer?
- Pues claro, pero no es fácil.
- Requiere compromiso con lo que uno hace, significación, retos (cada día una cosa nueva), constancia, y sentido de la trascendencia.
¿Y la bondad tiene tanta importancia?|
- Sí: generalmente somos buenos con los demás. Y si lo somos con ellos, ¿por qué no lo somos con nosotros mismos?
- Ser inteligentemente egoístas es algo que le escuché al Dalai Lama: el espejo sabio es aplicarte la sabiduría, conocerte a ti mismo, pero eso requiere tiempo, preguntas y respuestas, que hables contigo mismo. Pero no se suele hacer.
- El amor duro es difícil, el amor por ti mismo y por tu familia, con esa generosidad y constancia es muy difícil.
¿Otro consejo útil es reírse de uno mismo?
- Obviamente es un concepto clásico: lo decía Tomás Moro, antes de que le cortaran la cabeza escribió 20 bienaventuranzas, la primera es 'aprende a reírte de ti mismo y tendrás diversión para rato'
- La inteligencia divertida es mucho más sabia que la inteligencia triste.
- Es mucho más difícil hacer poesía divertida que triste, lo mismo pasa con la ciencia.
- Porque les ayudo, porque me siento feliz haciéndolo, porque me gratifican, me dan buenas noticias, me quieren, me aprueban... : tengo más del 51% de aprobación, con lo cual puedo sentirme feliz.
- Es verdad que por mí consulta pasan muchas personas con problemas ¿y repercute en mis neuronas espejo? Sí, me siento triste pero no es lo mismo eso que estar enfermo.
- Cada mañana cinco minutos: seguro que te das cuenta de algo que ha ocurrido y que te está preocupando.
- Y le puedes decir a tu yo que aprenda: hay que hablar las cosas en voz alta, para aprender.
¿Su familia es importante para usted?
- Fundamental: he tenido mala suerte porque he tenido una familia predecesora compleja y caótica. Mis abuelos murieron muy jóvenes. Mis padres se separaron de forma dramática. Perdí a mi suegra, una de las personas que más he querido, de una forma también dramática.
- De tal manera que suelo presumir de que soy casi el único casado de toda la familia: eso me ha hecho darle una importancia cardinal a lo que tengo, es una familia pequeña pero muy amante, con mi mujer y mis dos hijos.
- En nuestra casa no se concibe salir o irte a dormir sin dar un beso, sobre todo si reñimos. Esto es un aprendizaje.
¿Qué papel tiene su mujer en su vida?
- Pues lo he ido descubriendo según he escrito el libro: es mucho, pero no lo sabía.
- El origen de este libro está en 1977, cuando la conocí a ella, y cuando ella me habló de unos niños que no eran capaces de reconocerse en fotografías, porque nunca se habían mirado al espejo.
- El diálogo sobre el espejo es constante en casa, hasta el punto de que el libro estaba ya preescrito cuando me puse a hacerlo.
- Los dos somos muy amantes del arte: cuando empezamos a trabajar, con los primeros dineros que ganamos nos comprábamos cuadros.
- Es una mujer que tiene 52 años y es muy guapa y alta, tiene un gran estilazo: la ves y dices: '¿con lo guapa que eres y que estés tan preocupada por el físico?' Ella me ha enseñado mucho. Las mujeres tenéis una importancia cardinal en el cerebro de los hombres, os metéis en nuestro cerebro, y menos mal.
Fuente: www.DiarioSalud.net