La fosfomicina (a veces designada como fosfonomicina o MK-955) es un antibiótico fabricado por diversas especies de bacterias. Forma parte de los llamados ácidos fosfónicos y se utiliza especialmente en el tratamiento de las infecciones urinarias. El papel de la fosfomicina es inhibidor: disminuye la actividad de un enzima (proteína) que contribuye en la síntesis de la pared bacteriana. En Francia la fosfomicina se comercializa con diferentes nombres (Fosfocina, Monurol, Uridoz).