La mastitis es una inflamación por una infección bacteriana de los senos. La bacteria Estafilococo dorado, presente de forma natural en la piel, penetra en el organismo a través de una fisura, sobretodo a nivel de un pezón irritado. Esta bacteria se instala en el tejido graso mamario provocando dolor, enrojecimiento, hinchazón del seno, fiebre, secreción por el pezón y picores. La antibioticoterapia es el tratamiento de elección. Si no se trata una mastitis puede provocar un abceso y una septicemia.