Una intoxicación alcohólica aparece cuando el consumo de bebidas alcohólicas provoca una intoxicación del organismo. Estar borracho se puede calificar como una intoxicación alcohólica aunque en sí misma no sea patógena. La intoxicación alcohólica depende de la tasa de etanol en la sangre. Cuanto más elevada es mayor riesgo existe para la vida del paciente. Los signos clínicos de la intoxicación alcohólica son la ausencia de respuesta cuando se le solicita, la ausencia de reflajos, la pareda respiratoria, el coma y la parada cardíaca.