El test de Renne es un test clínico que se practica en caso de dolor en una rodilla (sobretodo en su parte externa). Permite detectar un síndrome del limpiaparabrisas (cuando la banda ilio-tibial frota sobre la parte inferior del fémur), que es una forma de tendinitis que se observa sobretodo con la flexión de la rodilla. Este test consiste en pedirle al paciente que se mantenga sobre un pie y que flexione y extienda varias veces la otra rodilla. El test de Renne es positivo (es decir, indica que hay un problema) si este movimiento desencadena dolor.