La tos es un síntoma inherente a la protección del aparato respiratorio. Hablamos de tos aguda para referirnos a aquella que no sobrepasa las cuatro semanas, subaguda hasta ocho semanas y crónica a aquella tos de más de ocho semanas. La tos puede ser específica e inespecífica según esté asociada o no a una causa conocida. Por último, hablamos de tos crónica refractaria (TCR) para referirnos a aquella tos crónica que persiste a pesar de las terapias dirigidas a las asociaciones conocidas.
La tos crónica es un síntoma muy frecuente en la práctica clínica. Tiene una prevalencia variable en la población general de entre el 12 y el 3,3%. El hábito de fumar está muy vinculado a la TC, pues existe una prevalencia de TC tres veces más alta que los que nunca han fumado o los exfumadores. Una mayor prevalencia de TC también ha sido relacionada a la contaminación ambiental.
En el primer contacto del médico con un paciente con TC se deben apreciar las causas generales de TC así como los síntomas de alarma asociados.
Si la persona con tos crónica tiene una radiografía de tórax normal, no es fumador y no toma inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) hay que proseguir los estudios para buscar las posibles causas.
Cinco son las afecciones de la vía aérea superior que pueden cursar con TC: la rinitis alérgica, la rinosinusitis crónica del adulto, la apnea obstructiva del sueño o SAS, una disfunción de las cuerdas vocales (DCV) y la manifestación extraesofágica del reflujo gastroesofágico o reflujo laringofaríngeo (RLF).
La mayoría de las toses que se relacionan con infecciones de las vías respiratorias superiores se resuelven en un período no mayor de tres semanas; sin embargo, la tos puede tardar más en desaparecer en una pequeña proporción de pacientes. La Bordetella pertussis, responsable de la tos ferina, es cada vez más reconocida como causa de TC. El diagnóstico se establece con el cultivo y la reacción en cadena de la polimerasa (PCR en inglés) en muestras de vía aérea superior. El tratamiento antibiótico con azitromicina debería ser considerado en casos sospechosos.
En el 96% esta tos de origen psicógeno la encontramos en niños y adolescentes. El 95% de los pacientes no tienen tos durante el sueño. La hipnosis es eficaz en la resolución de la tos en el 78% de los pacientes. En general, el diagnóstico de tos psicógena debe hacerse después de descartar las causas más frecuentes de TC y cuando la TC mejora con modificaciones conductuales y/o terapia psiquiátrica.
Encontramos también tos crónica en relación con diversas profesiones como en los trabajadores del vidrio y en ambientes laborales con un alto contenido en polvos y materiales orgánicos. La TC por irritación de la rama auricular de nervio vago (nervio de Arnold) puede ocurrir raramente, al igual que la TC que acompaña a la traqueobroncopatía osteocondroplásica.