El virus de Epstein-Barr es un virus de la familia de los herpes virus. Ataca de forma específica a ciertas células inmunitarias que tienen un papel en la defensa del organismo frente a las agresiones externas por microorganismos: los linfocitos B. El virus de Epstein-Barr es el responsable de enfermedades como la mononucleosis infecciosa, que se transmite por la saliva (de ahí su apodo de enfermedad del beso). Causa una angina con depósitos blanquecinos que hacen pensar en falsas membranas (de ahí el nombre de angina pseudo-membranosa), una gran fatiga, fiebre y presencia de gánglios linfáticos aumentados de tamaño o adenopatías. Este virus también es la causa de un tipo particular de cáncer que afecta a los ganglios linfáticos, el linfoma de Burkitt, y a veces está implicado en la enfermedad de Hodgkin.