La pericarditis aguda es una inflamación temporal del pericardio, que es la membrana constituída por dos hojas que forman el saco que rodea al corazón.
Sus causas pueden ser muy numerosas: infecciones causadas por virus, cáncer, tuberculosis o como consecuencia de un infarto del miocardio. La inflamación también puede estar asociada con la aparición de líquido en la cavidad pericárdica delimitada por las dos hojas.
Los principales síntomas son: fiebre, dolor en el pecho repentino e intenso que se alivia cuando el paciente se inclina hacia delante pero que aumenta con la inspiración y con la tos.
Diferentes exámenes nos permiten encontrar las causas como el electrocardiograma, el análisis de sangre o la ecocardiografía confirman el diagnóstico.
La mayor parte de las pericarditis agudas suelen sanar cuando el tratamiento es el adecuado, pero a veces pueden progresar hasta el taponamiento cardíaco que impide que el corazón se contraiga correctamente.