Hola Santiago. Aunque es lamentable la situación que atraviesas, debes saber que es totalmente normal… todo esto forma parte de un proceso de desintoxicación.
Debes estar consciente de que el cigarrillo contiene un sinnúmero de químicos que altera TODO el organismo; desde el oxígeno presente en sangre, hasta la flora bacteriana que tienes en la boca.
Una vez que dejas el hábito, tu cuerpo empieza a sanar y desechar los químicos a través de sudor, orina y heces. A continuación, te describo algunos procesos causa-efecto con su explicación científica. Esto te dará un poco más de tranquilidad:
Cefalea (dolor de cabeza): sucede al dejar de fumar, porque tu sangre no está saturada con dióxido de carbono y demás químicos. Ahora que dejaste el hábito, tu cerebro recibe más oxígeno de lo que está habituado; por ello, es normal sentir dolores esporádicos.
Dolor de espalda (pulmones): el humo de tabaco atrofió las microvellosidades llamadas “cilios”, que se encuentran dentro de los pulmones. Cuando dejas de fumar, estas estructuras recuperan sus funciones… este proceso suele causar molestias, mayor mucosidad en la saliva, flemas, tos, etc.
Mareos, vértigo, sudoraciones, entumecimiento de manos y pies, y falta de aire: todos estos síntomas son netamente psicológicos en repuesta a la ANSIEDAD. Dado que tu cuerpo no está recibiendo los químicos (drogas) del cigarrillo, tu organismo emite señales en concordancia a la abstinencia del hábito. Estas sensaciones extrañas suelen durar un par de meses, y también pueden ser controladas con ayuda de terapia psicológica.
Resfriados e Inflamación de garganta o boca: la flora de tu boca y vías respiratorias, estaba acostumbrada a recibir altas dosis de químicos tóxicos diariamente. Ahora que dejaste el hábito, los microorganismos cambiaron… por ello, es común resfriase con frecuencia y tener inflamaciones o lesiones inexplicables en boca, paladar, lengua, o garganta.
Si bien no existe una guía o receta de cómo sobrellevar la abstinencia, te sugiero mantenerte hidratado, realizar actividad física aeróbica, comer saludable, evitar productos azucarados y grasas, hacer respiración controlada al despertarte y antes de dormir, y sobretodo, mejorar tu calidad de vida… todo eso será beneficioso para tu estado físico y mental en estos momentos tan duros. También considera buscar ayudar psicológica, y realiza los exámenes rutinarios como un hemograma y revisión con un Otorrinolaringólogo.
Espero que esta información te haya sido útil. Yo atravesé algo similar, y apenas hace 2 meses deje de fumar… aún tengo crisis por abstinencia, pero créeme que es posible deshacerse de la adicción…. Todo está en tu mente y voluntad.