La ginecología obstétrica designa varias disciplinas médicas y, más precisamente, quirúrgicas. Se ocupa del seguimiento del embarazo y del parto. Un ginecólogo obstétrico se ocupa, pues, de la mujer pero también del niño que espera, ayudado por una comadrona y/o una enfermera. Realiza todos los exámenes (ecografías, amniocentesis,...) para establecer los diagnósticos prenatales y después ocuparse del parto, incluída la cesárea si es necesaria.