El edema agudo de pulmón (EAP), como todos los edemas, se caracteriza por una acumulación anormal de líquido. En este caso, el líquido se acumula en el pulmón, más exactamente en los alveolos (pequeños saquitos donde tienen lugar los intercambios gaseosos con la sangre). Un EAP puede ser causado por una hipertensión pulmonar (edemas de origen cardíaco) o por una ruptura de la membrana situada entre los vasos y los alveolos (edema pulmonar lesional). El EAP provoca dificultad para respirar y dolores torácicos. Es una urgencia médica.