Toallas higiénicas y tampones: Ventajas e inconvenientes

Durante la menstruación, las mujeres disponen de una vasta elección de protecciones higiénicas, como toallas higiénicas desechables o lavables o tampones higiénicos. A continuación un panorama sobre las características, las ventajas y los inconvenientes de cada tipo de protección.

Toallas higiénicas

Las toallas higiénicas son protecciones externas, que se llevan dentro de la ropa interior gracias a una banda autoadhesiva. Su función es absorber la sangre de las menstruaciones.

Presentan la ventaja de ser menos agresivas para la vagina que los tampones, por quedarse afuera, pero necesitan ser cambiadas más a menudo con el fin de evitar los olores. Las toallas desechables forman parte de protecciones higiénicas menos económicas y ecológicas porque generan grandes cantidades de desechos

Toallas higiénicas lavables

Las toallas higiénicas lavables se utilizan como las toallas higiénicas clásicas, colocándolos al nivel de la entrepierna de la ropa interior. La diferencia, como su nombre lo indica, es que son reutilizables. Son hechas de algodón, biológico o no.

Las toallas higiénicas lavables tienen una vida útil de 5 años, menos que la de una copa menstrual que puede ser utilizada durante aproximadamente 10 años. Las toallas higiénicas lavables son más económicas y más ecológicas que las toallas higiénicas y los tampones desechables. Se lavan en la lavadora, como el resto de la ropa blanca. Los paquetes de varias toallas higiénicas lavables cuestan entre 15 y 30 euros según las marcas.

Tampones higiénicos

Contrariamente a las toallas higiénicas, lavables o no, los tampones son protecciones menstruales internas, que se insertan en la vagina, como las copas menstruales. En lugar de recoger la sangre como una copa, los tampones la absorben. Por lo general, los tampones higiénicos son hechos de viscosa, combinado con un poco de algodón. Existen marcas de tampones biológicos, totalmente hechos de algodón, que son más ecológicos.

Entre las ventajas de los tampones citemos sus lados discretos y prácticos y su comodidad. Permiten también evitar los malos olores.

Los tapones se presentan bajo dos formas, con o sin aplicador. Aunque los tampones con aplicadores son más fáciles de insertar, generan también más residuos.

De manera general, los tampones higiénicos forman parte de los medios menos económicos y ecológicos de protección, al igual que las toallas higiénicas desechables. A razón de 4 euros por caja y uno caja al mes por lo menos, son más caros que una copa menstrual cuyo costo varía entre los 15 y 30 euros.

Foto: © Birgit Reitz-Hofmann - Fotolia.com

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