Una hinchazón bajo la axila se corresponde con un aumento del volumen de los ganglios presentes en esta zona. Puede tratarse de los ganglios linfáticos (en este caso hablamos de adenopatías axilares) o de los ganglios nerviosos. Esta hinchazón puede tener múltiples causas: las más frecuentes son las infecciones virales o bacterianas pero también otras patologías más graves como un tumor -sobretodo a nivel del seno- o una enfermedad autoinmune pueden ser las responsables. Una hinchazón en una axila siempre justifica una consulta con el médico para determinar sus causas.