Un disfuncionamiento del oído interno se manifiesta por la aparición de vértigos, es decir, una sensación de pérdida de equilibrio y aturdimiento. Esto es debido al sistema vestibular, el órgano del equilibrio que se sitúa en el oído interno. Un disfuncionamiento del oído interno puede ser, por ejemplo, un desorden vestibular. Pero un disfuncionamiento del oído interno también puede provocar una disminución en la audición, incluso una sordera si la clóquea está afectada. Los tratamientos del disfuncionamiento del oído interno dependerán de las causas. A veces se utiliza la fisioterapia vestibular para curarlos.