Las hormonas del crecimiento se liberan desde el momento de la fecundación. La tasa de hormonas de HCG, que permite la nidación, es más alta durante el 3er mes. La mujer embarazada ve disminuir después su tasa de HCG de forma regular. La mujer embarazada también libera progesterona que permite la distensión del útero. La tasa de progesterona cae de forma radical cuando empiezan las contracciones. Las hormonas del embarazo desaparecen después del parto o después de un aborto.