El síndrome de shock tóxico es una afección rara, pero grave, provocado por toxinas liberadas por bacterias de tipo estafilococo dorado (staphylococcus aureus). En el transcurso del síndrome de shock tóxico, las bacterias liberan toxinas particularmente nefastas para todos los órganos del organismo.
Aunque sea más frecuente en las mujeres que utilicen tampones higiénicos, el síndrome de shock tóxico también afecta a los hombres. En ciertos casos, puede ser debido a una herida de la piel, una intervención quirúrgica reciente o a una picadura de insecto.
Es importante anotar que el síndrome de shock tóxico afecta sólo a las personas que no son inmunizadas contra la bacteria responsable. Se trata de una afección rara.
El síndrome de shock tóxico afecta principalmente a las mujeres que utilizan tampones higiénicos. Gracias a algunas medidas de prevención, es posible prevenirlo.
El síndrome de shock tóxico está asociado, la mayoría de las veces, con el uso de tampones higiénicos. Éstos pueden favorecer el desarrollo de la bacteria Staphylococcus aureus en la vagina. El usar un tampón higiénico demasiado tiempo (más de 8 horas) constituye uno de los principales factores de riesgo de shock tóxico.
Los síntomas del síndrome de shock tóxico son semejantes a los de la gripe. De este modo, el síndrome de shock se manifiesta por una sensación de malestar, extremo cansancio, una fuerte fiebre, dolores de cabeza y dolores musculares. También pueden aparecer diarreas, vómitos y enrojecimientos cutáneos similares a quemaduras solares.
El síndrome de shock tóxico se manifiesta repentinamente. En ausencia de tratamiento, las toxinas pueden extenderse a los órganos y provocar complicaciones que pueden comprometer el pronóstico vital. Es conveniente consultar a un médico inmediatamente si tales síntomas aparecen durante las reglas.
El síndrome de shock tóxico es una situación urgente que necesita una hospitalización inmediata. El tratamiento se basa esencialmente en medidas de reanimación y antibióticos. El pronóstico es generalmente bueno en caso de un tratamiento rápido.
No existe forma de saber si una persona está inmunizada contra la bacteria responsable del síndrome de shock tóxico. Es aconsejado respetar ciertas medidas de higiene para evitar este síndrome.
Utilizar tapones lo menos absorbentes posibles y con aplicador. Además, el cambiarlo regularmente permite reducir los riesgos de shock tóxico. Las mujeres que utilizan una copa menstrual deben limpiarla bien, sobre todo antes de la primera utilización y vaciarla cada 4 a 8 horas. Es indispensable lavarse las manos antes y después de haber manipulado una protección menstrual, copa o tampón.
Actualmente, las marcas privilegian la fabricación de tampones higiénicos de algodón en lugar de las sintéticas con el fin de evitar el desarrollo de las bacterias.
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