Algunas veces los síntomas del síndrome del túnel carpiano son muy invalidantes al punto de no poder trabajar y requerir rehabilitación profesional.
El síndrome del túnel carpiano es muy frecuente y aparece sobre todo en las mujeres a partir de los 50 años o durante el embarazo.
Numerosos factores de riesgo predisponen la aparición de un síndrome del túnel carpiano.
La diabetes y sus complicaciones neurológicas, la artritis, la gota, los quistes de la muñeca representan factores de riesgo del síndrome del túnel carpiano.
El riesgo es más elevado en las personas que efectúan ciertos oficios que exponen la muñeca y la mano a movimientos repetidos y prolongados, exigentes o que requieren mucha fuerza. Las criadas, los cajeros, peluqueros, obreros que trabajan en líneas de fabricación, los chóferes, los panaderos, las personas que trabajan en la construcción son las más expuestas.
Ciertas características fisonómicas, como la forma de la muñeca, pueden aumentar el riesgo.
Las personas que practican ciertas actividades como la jardinería, el golf o la costura por ejemplo son más propensas a contraer el síndrome del túnel carpiano.
Las mujeres embarazadas y las que están en el período de menopausia están particularmente predispuestas a este síndrome.
La toma de anticonceptivos orales así como los medicamentos contra las enfermedades de la tiroides favorecen la aparición del síndrome del túnel carpiano.
Las heridas en la muñeca exponen más a este síndrome.