Una lesión perforante es una lesión dermatológica, que aparece con más frecuencia en el pie, debida a un trastorno neurológico. La lesión perforante más conocida es la plantar y se observa principalmente en los diabéticos, sobre todo en la parte anterior situada debajo del pie. El desarrollo de la diabetes provoca entre sus complicaciones más frecuentes una neuropatía periférica con pérdida de la sensación del dolor.
La falta de la sensación de dolor asociada con la fuerza generada al caminar sobre las áreas de apoyo inicialmente produce una ligera inflamación que se convierte posteriormente en una ampolla. Después en esta zona puede formarse un agujero en ausencia de tratamiento y generar una herida que puede llegar hasta el hueso si no se trata.
El riesgo de infección es muy importante. La lesión perforante bucal es una forma muy rara y puede causar la pérdida de los dientes.