Golpe en la cabeza: ¿cómo actuar?

Las caídas con lesiones en la cabeza son las más frecuentes en los niños. Hay que prestarles especial atención y estar alerta aunque sean leves porque estos golpes pueden dañar el cerebro.

Vigilar durante las primeras 24 horas

Cuando un niño se da un golpe en la cabeza debemos vigilar su estado durante 24 horas o, mejor aún, durante las siguientes 72 horas. Hay que llevarlo al médico cuando aparece cualquier síntoma o comportamiento fuera de lo normal o cuando el niño sufre una pérdida de conocimiento, por breve que sea. Un traumatismo craneal también puede provocar lesiones en las cervicales.

¿Es recomendable dejarle dormir?

Es falso que no se deba dejar dormir a un niño por la noche si se ha dado un golpe en la cabeza. Lo más indicado es despertarle cada dos o tres horas para comprobar que se espabila y responde de una manera normal.
Después de darse un golpe en la cabeza el pequeño puede y debe seguir con su actividad habitual, esto es, dormir, comer y jugar a las horas que acostumbra a hacerlo. Es algo totalmente normal que se encuentre un poco abatido.

Si el traumatismo se acompaña de una herida o un corte

Como el niño sangra es importante observar si tiene cuerpos extraños incrustados y si los huesos ceden al tacto; en esos casos, no hay que tocar la herida y acudir a urgencias.
Si tiene un corte en la piel hay que lavarlo con agua bajo el grifo, presionar la herida con una gasa para detener la hemorragia y aplicar hielo envuelto en un paño.
En caso de que la herida sea profunda y grande y pueda necesitar una sutura: en este caso se debe acudir a un Centro Sanitario antes de cuatro horas.

Si se ha hecho un chichón

Es normal que al niño le duela la cabeza. Hay que aplicar frío local con hielo envuelto en un paño y darle un analgésico. Si el chichón va a más, se hace largo y blando hay que ?acudir a un centro sanitario lo antes posible.

Cuando aparece un morado pero no hay herida

En este caso también es normal que el niño tenga dolor de cabeza. Hay que aplicar frío con hielo envuelto en un paño y darle un analgésico suave. Es importante comprobar que el morado y el dolor van calmando: si vemos que aumentan, hay que llevar al niño a un Servicio de Urgencias.

Dirigirse a Urgencias

Si aparece alguno de los siguientes síntomas hay que dirigirse a urgencias:

  • Pérdida de conocimiento.
  • Vómitos.
  • Irritabilidad.
  • Tendencia al sueño.
  • Un hematoma blandito, que va creciendo.
  • Respiración más rápida de lo normal o quejosa.

Saber más

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CCM Salud es una publicación informativa realizada por un equipo de especialistas de la salud.
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