La intolerancia al gluten o enfermedad celíaca es una malabsorción intestinal provocada por una intolerancia en la gliadina, proteína contenida en el gluten, presente en numerosos cereales.
El gluten ataca y destruye las vellosidades de las paredes del duodeno, revestimiento interno del intestino delgado, impidiendo así una asimilación de los alimentos.
Esta enfermedad produce una inflamación crónica del intestino que provoca un malabsorción de numerosos nutrientes.
La intolerancia al gluten, también llamada enfermedad celíaca, puede aparecer en cualquier edad, especialmente en el niño durante una diversificación alimentaria, a partir de 6 a 8 meses aproximadamente.
Los síntomas pueden aparecer en el curso de algunas semanas que siguen a la absorción del gluten en los biberones.
Los síntomas abdominales en el bebé pueden ser parecidos a los síntomas en el adulto: episodios de diarrea con estreñimiento, vómitos, hinchazones de vientre, abdomen voluminoso y dolores abdominales aparecen la mayoría de las veces.
Cansancio, anemia, irritabilidad, problemas del esmalte dentario pueden acompañar a los síntomas de la intolerancia al gluten.