La neuritis vestibular es una respuesta inflamatoria del nervio vestibular situado en el interior del oído por el ataque de un virus. Causa repentinos y significativos vértigos, con o sin náuseas o vómitos , pero sin mostrar signos neurológicos o auditivos. Las manifestaciones de la neuritis vestibular pueden parecer inquietantes pero se trata de una enfermedad benigna. Es una causa frecuente de vértigos. Este y otros síntomas que pueden acompañarlo suelen durar de una a varias semanas y su recuperación es espontánea, sin dejar secuelas.
La neuritis vestibular es responsable de síntomas inquietantes de inicio violento:
No aparecen signos auditivos o neurológicos en este contexto. Los síntomas duran unos pocos días antes de volver a la normalidad.
Un examen clínico general se completa con un exámen de los oídos y algunos test sencillos de posición para detectar la aparición o no de vértigo. Ningún otro exámen adicional es necesario para hacer el diagnóstico, pero en el contexto de la búsqueda de otras posibles patologías se solicitan habitualmente unas pruebas de audición, imágenes cerebrales o pruebas especiales llamadas pruebas vestibulares calóricas (utilizando agua a diferentes temperaturas que se introduce en los oídos). Estos exámenes permiten descartar algunas causas serias y graves de vértigos como los tumores del cerebro, los AVC o la toma excesiva de medicamentos.
El paciente deberá hacer reposo en cama de unos pocos días a varias semanas, dependiendo de la duración de los síntomas. Se prescriben medicamentos contra las náuseas, llamados antieméticos si las náuseas persisten. Por último, el paciente puede ser dirigido a un especialista para realizar una rehabilitación vestibular para ayudarle a corregir las sensaciones de vértigo.