La clorhexidina está presente en numerosos productos de nuestra vida cotidiana. Una exposición prolongada a la clorhexidina puede provocar síntomas alérgicos como un eczema de contacto o una estomatitis alérgica.
La clorhexidina se utiliza en el dominio médico, paramédico y dentario. La clorhexidina es un antiséptico de amplio espectro de acción utilizado para desinfectar la piel y las mucosas. Actúa en las heridas superficiales y poco extendidas. Se encuentra en los enjuagues, los antisépticos y en ciertos dentífricos.
También la encontramos en las cremas con corticoides.
La clorhexidina se encuentra en algunos cosméticos y desmaquilladores, bajo la forma de digluconato de clorhexidina como agente antimicrobiano. La utilización de cosméticos que contienen clorhexidina puede provocar un retraso en el mejoramiento en los pacientes que presentan una alergia a la clorhexidina.
La clorhexidina puede provocar síntomas alérgicos como un eczema de contacto o una estomatitis alérgica pero también causar un eczema de contacto o una estomatitis alérgica.
La estomatitis provoca una pérdida de gusto, una sensación de sequedad, una insensibilidad, un dolor y una irritación.
Una persona alérgica a la clorhexidina debe leer bien la etiqueta o prospecto del medicamento o del cosmético utilizado y someter a un test el nuevo cosmético, colocando un poco del cosmético en el brazo por ejemplo.