El retraso en la eyaculación refleja una dificultad en la expulsión del semen a pesar de pasar por la fase de excitación sexual. Se vive como un verdadero fracaso. El tiempo necesario para la evacuación del esperma es considerado demasiado prolongado para el hombre y puede generar complejos o ser motivo de sufrimientos.
Esta disfunción sexual puede ser de tipo permanente o transitorio. Se distinguen entre ellos por la forma en que se presentan. La eyaculación retardada permanente se manifiesta en cualquier circunstancia, mientras que la eyaculación retardada transitoria está determinada únicamente por situaciones específicas.
La razón o causa mas citada por los especialistas en sexualidad es la preferencia de las prácticas masturbatorias a las relaciones sexuales con pareja. Otras razones son la edad, una malformación, enfermedades genitales o generales, operaciones quirúrgicas, ciertos medicamentos o sustancias tóxicas.
Se debe distinguir de la aneyaculación que puede ser de origen psicológico o también secundaria a una enfermedad o cirugía, como la extirpación de la próstata .
La eyaculación retardada puede ocurrir por: un pene poco receptivo a la estimulación por una pareja, demasiada concentración para lograr la excitación, erección insostenible, número excesivo para el hombre de idas y venidas intravaginales.
No obstante, en la mayoría de los casos, no se presentan problemas en la eyaculación cuando el hombre se masturba en ausencia de una pareja.
En primer lugar, hay que descartar las causas fisiológicas haciendo un examen general. Un origen psicológico del trastorno puede ser identificado durante el interrogatorio del paciente. A veces la ayuda de un especialista en sexología puede permitir evaluar la percepción de la excitación durante el acto sexual. Una ecografía también puede ayudar a detectar una disfunción del circuito eyaculatorio.
Buscar asistencia médico-psico-sexológica puede dar buenos resultados, ya que las causas del retraso en la eyaculación son sobre todo psicológicas. Por lo tanto, es importante determinar las exigencias de desempeño sexual impuestos por alguno de los miembros de la pareja, la existencia de un conflictos o enojos y también la calidad de la excitación durante toda la duración del acto sexual.
Para limitar los factores psicológicos que pueden conducir a una eyaculación tardía, es mejor evitar los conflictos en la relación de pareja y estimular la comunicación. Por otra parte, una serie de factores externos pueden ayudar a reducir los problemas de falta de eyaculación, por ejemplo: dejar de fumar, la abstinencia de alcohol y llevar un estilo de vida saludable.
Foto: © Hugo Felix - Shutterstock.com