Se refiere a un término de evaluación centrado en el análisis de la sangre. Indica el porcentaje del volumen de la sangre compuesto por glóbulos rojos.
El término hematocrito corresponde con el volumen de los glóbulos rojos en la sangre en comparación al volumen de sangre total; se expresa como un porcentaje. En el hemograma completo se determina el balance biológico gracias a una muestra de sangre. Los valores normales de hematocrito están comprendidos entre 40 % y 55 % en los hombres, mientras que en las mujeres varía entre 33 % y 50 %. Cada tipo de variación puede destacar una patología.
La disminución del hematrocito (hematocrito bajo) puede indicar anemia en la mayoría de los casos (disminución de los glóbulos rojos o hemoglobina). Puede estar relacionada con diferentes causas, como la deficiencia de hierro, la mala absorción desde el intestino, la anemia perniciosa (enfermedad de Biermer) o pérdida excesiva de sangre. La anemia causa palidez cutánea, fatiga, aumento del ritmo cardiaco, dolor de cabeza, dificultad para respirar o respiración rápida.
Un valor alto de hematocrito, por el contrario, indica una policitemia (aumento en el número de glóbulos rojos). La policitemia puede indicar una etapa de la enfermedad de Vaquez-Osler, una patología que afecta también a la médula ósea, el centro donde se sintetizan los glóbulos rojos de la sangre. Un valor alto de glóbulos rojos en la sangre puede estar relacionado, de manera secundaria, con alguna enfermedad del corazón, tumores, cáncer o aumento de la síntesis de las hormonas que estimulan la producción de estas células sanguíneas.
En caso de policitemia, la sangre es más espesa y aumenta el riesgo de trombosis o la aparición de coágulos de sangre que pueden obstruir el flujo sanguíneo. La policitemia puede provocar dolores de cabeza, hipertensión, tinnitus o acúfenos (zumbido en los oídos).
Con el hematocrito por sí solo no puede realizarse un diagnóstico integral. Su estudio se debe complementar con otras pruebas para destacar patologías. En el hemograma completo se determina el valor del hematocrito, además de la hemoglobina, el recuento de glóbulos rojos y el volumen corpuscular medio. El valor de hematocrito no puede interpretarse, por lo tanto, sin el resto de los eritrocitos en la sangre.
El tratamiento recomendado por el médico tiene como objetivo el aumento de los glóbulos rojos de la sangre, en el caso de anemia; mientras que en caso de policitemia o en presencia de la enfermedad de Vaquez-Osler, probablemente se recomienden las sangrías y la administración de fármacos específicos.