Una hematemesis indica una expulsión de sangre de origen digestivo por la boca. Esta sangre puede ser de color rojo en caso de que venga acompañada por la tos (en este caso hablamos de hemoptisis y no de hematemesis) y el origen lo encontramos en el pulmón o en los bronquios. En caso de hematemesis sangre de color más o menos oscuro se expulsa con el vómito. La hematemesis es, pues, síntoma de una hemorragia digestiva alta que puede tener varios orígenes: úlcera gastroduodenal, ruptura de varices esofágicas, ingestión de medicamentos tóxicos para el estómago (antiinflamatorios, aspirina,...).