Los hidratos de carbono, comunmente denominados glúcidos, están formados por moléculas compuestas por un grupo carbonilo y varios grupos hidroxilo. Ciertos individuos tienen lo que denominamos intolerancia a los hidratos de carbono que se manifiesta por un tasa de glucemia superior a la media pero no suficientemente elevada para hablar propiamente de diabetes. A veces hablamos en estas ocasiones de prediabetes. Esta patología afecta sobretodo a los individuos mayores de 40 años. El tratamiento de la intolerancia a los hidratos de carbono se basa en medidas de higiene alimentaria pobre en azúcares rápidos y en la práctica de una actividad física regular.