La malabsorción de las grasas es debida a una dificultad para destruir las moléculas de grasa para que puedan ser asimilables por el organismo. Este tipo de problema puede aparecer en caso de patología pancreática (insuficencia) o biliar pero también en caso de ciertas infecciones, diverticulitis (inflamación intestinal con presencia de divertículos) o de transtornos intestinales. La malabsorción de las grasas también puede aparecer en caso de una disminución en la superficie de absorción del intestino delgado como la que aparece en caso de enfermedad celíaca o de una gastroenteritis entre otras causas.