Cuando una persona ríe o sonríe porque está alegre genera una sustancia benéfica para su organismo. La risa es un privilegio del ser humano, ningún otro animal se ríe. La risa produce un enorme bienestar a las personas. Sigmund Freud afirmaba que la risa -sobre todo la carcajada- ayuda a liberar la energía negativa.
Cuando una persona se ríe de verdad entonces en su cerebro se liberan endorfinas (neurotransmisores secretados por la glándula pituitaria del cerebro, que tienen un efecto de tipo opiáceo similar a la morfina). Por eso las endorfinas se conocen como "opiáceos naturales". También se libera un neurotransmisor cerebral llamado dopamina muy relacionado con los estados de bienestar psicológico. Al mismo tiempo, cuando una persona se ríe de verdad, disminuyen sus niveles de cortisol que es una hormona conocida como la "hormona del estrés".Un sondeo realizado en Francia demostró que el 26 % de los franceses ríen a carcajadas dos o tres veces al día. El 30 % son mujeres y el 22 % hombres.
Reirse ayuda a curar la depresión, el estrés y la angustia. Nos ayuda a sentirnos mejor, más confortables. Limpia y ventila los pulmones. Mejora la oxigenación el cerebro y del cuerpo en general. Regulariza el pulso cardíaco. Ayuda a trabajar al aparato digestivo y regula el intestino. Relaja los músculos tensos. Disminuye la producción de hormonas que causan el estrés. Disminuye la presión arterial de la sangre.
Ayuda a quemar calorías: cuando nos reímos movemos unos 400 músculos de nuestro cuerpo. Algunos investigadores creen que reír 100 veces es equivalente a hacer 10 minutos de ejercicio aeróbico o hacer 15 minutos de bicicleta. Al reír se segregan endorfinas, unas drogas naturales que provocan euforia y efectos tranquilizantes y analgésicos. Se fortalecen los lazos afectivos. Se genera una mayor respuesta del sistema inmunológico ante la enfermedad. Sirve para descargar tensiones, potencia la creatividad y la imaginación. Incrementa la autoestima y la confianza en uno mismo. Es una fórmula eficaz para eliminar pensamientos y emociones negativos. Alivia el insomnio al producir una sana fatiga que el sueño repara con facilidad.
En muchos países existen actualmente las llamadas "clínicas de risoterapia", en las que se ayudan a curar muchas enfermedades solo con la risa. La risioterapia es una técnica de curación reciente que mediante la risa consigue generar estados anímicos que influyen en nuestro cuerpo y nuestra mente. Cuando nos reímos se genera un estado de ánimo positivo. Nos ayudan a asumir una visión positiva y tranquila de las cosas y nos hace sentirnos humanos, hermanados. Investigaciones más recientes sobre la risioterapia se están llevando a cabo en Suiza aunque los pioneros en crear centros dedicados a la risa han sido los americanos y los canadienses.
La risa favorece la producción y liberación de sustancias bioquímicas como la dopamina, que nos eleva el estado de ánimo; la serotonina, tipo de endorfina con efectos calmantes y analgésicos; o la adrenalina, que nos permite estar más despiertos y receptivos, proporcionando mayor creatividad.
El hombre y la mujer son los únicos animales que saben reír. Es un sentimiento humano y al mismo tiempo irracional. Nos reímos de lo que vemos, de lo que oímos, por imágenes mentales, por el placer de un hecho, por gesticulaciones cómicas, ocurrencias de nuestros amigos o compañeros de trabajo, algo necio o soez, por preguntas y frases absurdas, por ironías inteligentes y divertidas. No se sabe todavía porqué hay personas que se ríen más que otras. Es una manera de afrontar la vida: la risa no deja de ser nuestra defensa ante la sociedad.
Basándose en su experiencia, el psicólogo José Elías piensa que la juventud actual tiene mucho confort pero no es feliz: a menudo pretenden tenerlo todo sin esfuerzo, que las cosas surjan de la nada, y quieren sobre todo tener sus necesidades cubiertas. Les hace falta reír. En general la gente mayor asegura que antes se reían mucho más y que ahora han perdido la sonrisa, se han quedado solos y la tristeza se apodera de ellos. En general las mujeres se ríen más que los hombres porque se han tenido que defender de muchas más cosas en la vida. En la risa influye el arraigo cultural, las costumbres y las connotaciones sociales.
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