El término diagnóstico diferencial define a los otros diagnósticos posibles que no son el diagnóstico establecido finalmente, aquellos en los que el médico puede pensar en función de los diferentes síntomas que presenta el paciente. El diagnóstico diferencial también puede designar los diferentes métodos utilizados por un médico para establecer el diagnóstico correcto. El diagnóstico diferencial combina los conocimientos teóricos y prácticos adquiridos durante los estudios médicos, el examen clínico, los síntomas del paciente y los exámenes complementarios, biológicos y radiológicos. El médico analiza estos diferentes elementos para determinar la patología responsable y ofrecer el tratamiento adecuado.