Una sobrecarga de líquidos es una retención de agua que se suele manifestar por la presencia de unos edemas. Puede aparecer en ciertas circunstancias particulares como el embarazo ((en el 30% de las embarazadas) pero también en el curso de ciertas patologías. Una sobrecarga de líquidos la encontramos también en casos de insuficiencia renal, de insuficiencia cardíaca o de cirrosis hepática con síndrome nefrótico. Además ciertas sobrecargas de líquidos pueden tener un origen medicamentoso.