La fecundación in vitro - Síntomas

Definición

La fecundación in vitro ( FIV ) es una técnica de reproducción médica asistida o PMA Se dirige a las parejas que hayan vivido juntos durante al menos dos años y que no logran tener hijos a pesar de haber tenido relaciones regulares. Esta técnica consiste en realizar una fecundación artificial en una probeta tras la extracción de un espermatozide (gameto macho) y de un óvulo (gameto hembra). El embrión, al estadio mínimo de 4 u 8 células, es implantado en la cavidad uterina. La tasa de éxito es de cerca del 25 %. Esta técnica se usa después de identificar las causas de la infertilidad en los casos de problemas a nivel de las trompas en las mujeres, o de anomalías en los espermatozoides identificados en los hombres. También puede utilizarse la FIV después de varios fracasos de inseminaciones artificiales intrauterinas.

Síntomas

La infertilidad se manifiesta por la dificultad o incapacidad de una pareja para tener un hijo .

Diagnóstico

Antes de poner en marcha una FIV se debe haber hecho el diagnóstico de infertilidad en la pareja . Una vida en común por lo menos de dos años debe ser justificada por la pareja solicitante. Se debe realizar diversas pruebas en busca de la causa de este fracaso: un balance hormonal, un examen de los órganos genitales femeninos por ecografía pelviana o histerosalpingografía (estudio del útero y de las trompas) y un estudio del esperma en el caso del hombre.

Tratamiento

La fertilización in vitro se realiza en tres etapas:

  • la estimulación ovárica por tratamiento hormonal. Esto permite crecer a varios folículos ováricos y tras una ovulación desencadenada con medicamentos se recuperan los ovocitos por punción folicular con anestesia general;
  • la inseminación en probeta: esperma recuperado por masturbación es conservado y es descongelado y los espermatozoides más móviles son recogidos y puestos en contacto con los ovocitos ;
  • la implantación de uno o dos embriones en el útero a través de la vagina.

Con el consentimiento expreso de los padres, los embriones sobrantes se pueden congelar. Si es necesario podrán ser posteriormente implantados en el útero de la madre.
En ciertos casos se puede realizar un ICSI, es decir, la implantación directa de un espermatozoide en el ovocito: se utiliza en casos de azoospermia mayor (ausencia casi completa de espermatozoides con toma de muestra de los pocos espermatozoides por punción directa en el testículo)

Prevención

Para aumentar la capacidad de una pareja para conseguir un embarazo se deben mantener relaciones sexuales regulares, especialmente cerca del momento de la ovulación (una media de 14 días antes del inicio de la siguiente regla es el período más fértil). Es importante abandonar las sustancias tóxicas como el tabaco, el alcohol o las drogas porque tienen efectos adversos sobre la fertilidad.

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