Los oxiuros intestinales

El oxiurus es un parásito intestinal muy frecuente que provoca picazón o prurito en la zona anal y mucha irritabilidad y nerviosismo. Afecta sobre todo a los niños en edad escolar y preescolar, y puede diagnosticarse de una manera muy sencilla mediante el "test de Graham".

¿Qué síntomas suelen aparecer?

Los oxiuros no siempre provocan síntomas. Cuando estos aparecen suelen provocar picazón en la zona anal y en la nariz -sobre todo por las noches-, irritabilidad, mal dormir durante la noche y nerviosismo. Las mujeres, además, pueden tener picazón en la zona genital y flujo. Los niños suelen rascarse la zona anal.
También muchos chicos rechinan los dientes durante el sueño (bruxismo). Las náuseas, los vómitos y los dolores abdominales son poco frecuentes. Esta parasitosis no produce diarrea ni son causa de desnutrición.

Diagnóstico de los oxiuros

Podemos identificar al oxiuro es a través de un estudio llamado "test de Graham", que es muy sencillo y poco costoso. El método consiste en colocar un un trozo de tela adhesiva transparente en la zona que circunda al ano, preferentemente por la mañana, antes de que el niño se bañe. Los huevos del parásito quedan atrapados en la cinta y pueden observarse en el laboratorio, utilizando un microscopio.

Tratamiento

Existen varios medicamentos eficaces para tratar esta enfermedad. En general, se administran en una única dosis, que debe repetirse al cabo de dos semanas.

Recaídas o reinfecciones

Son frecuentes por lo que es necesario tener en cuenta que deben tratarse todos los miembros del grupo familiar y respetarse rigurosamente las medidas de higiene.

¿Dónde viven y cómo se contagian estos parásitos?

Los oxiurus se contagian al ingerir los huevos del parásito. Una vez ingeridos, los huevos se desarrollan hasta transformarse en parásitos adultos que viven en el intestino. Después empiezan a ser eliminados por las heces. La presencia de huevos en esta zona produce una intensa picazón que incita al rascado. De esta forma se contaminan las manos. Los huevos son llevados a la boca a través de las manos y al ingerirlos se reinicia nuevamente el ciclo, que dura de 25 a 28 días.
Los huevos eliminados contaminan la ropa interior, las sábanas, el medio ambiente, los muebles y los juguetes y pueden, además, transmitirse a otras personas a través de las manos, o por contacto con esos elementos.
En el medio ambiente los huevos sobreviven aproximadamente 15 días. No todos son capaces de transmitir la infección. Esto dependerá de las condiciones de temperatura, humedad y de la exposición a los rayos solares. Las temperaturas altas, la baja humedad y la acción directa del sol destruyen los huevos.

Algunas recomendaciones

La higiene personal es muy importante y deben lavarse las manos antes de comer, preparar alimentos y después de ir al baño. Las uñas deben mantenerse cortas y cepillarse para arrastrar los huevos que se depositan debajo de las mismas.
El baño diario debe ser de ducha y no de baños inmersión ya que los huevos depositados en la zona anal pueden desprenderse y quedar en el agua. Si el niño los ingiere puede reinfectarse.
Diariamente se debe cambiar la ropa interior y la ropa de cama. Los huevos se destruyen al ser expuestos a temperaturas mayores de 55º C durante algunos segundos. Por ello, hervir la ropa o emplear lavadoras domésticas que regulan la temperatura del agua y el planchado ayudan a controlar esta infección.
La casa se debe limpiar con aspiradora durante varios días luego del tratamiento de los casos, para sacar los huevos dispersos en el suelo, habitaciones y alfombras.
Se deben lavar los juguetes con agua y lavandina (dilución 1/3).

Avisar al colegio

Cuando un niño tiene oxiuros se debe avisar al colegio para que se pongan en marchas las medidas higiénicas necesarias para un adecuado control. Con medidas garantizadas, no será necesario que falte a la escuela.

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