La pericarditis aguda es una inflamación temporal del pericardio, la membrana que envuelve el corazón. Puede deberse a numerosas causas. Puede tratarse, por ejemplo, de una complicación de una septicemia (grave infección generalizada del cuerpo), de una tuberculosis (pericarditis tuberculosa), de un reumatismo articular agudo o incluso de una insuficiencia renal. Sin embargo, la mayoría de las pericarditis son de causa desconocida (aunque se sospecha un origen viral) y son benignas. El principal síntoma de la pericarditis aguda es un dolor violento a nivel del tórax, que empeora en posición estirado, durante la inspiración y durante la deglución. Este dolor se atenúa cuando el paciente se echa hacia delante. El tratamiento habitual es a base de analgésicos y antiinflamatorios no esteroideos. Si se detecta la causa también debe ser tratada.