La escoliosis es una desviación lateral de la columna vertebral debido a una angulación de las vértebras. Esto provoca un aspecto de rotación del raquis (otro nombre para la columna vertebral). La columna está frecuentemente desplazada no en un único plano, pero si en los tres planos del espacio. Es necesario distinguir la escoliosis verdadera, donde están realmente algunas vértebras están desplazadas del eje central, de una actitud escoliótica donde el aspecto de la inspección de la espalda dá la impresión de escoliosis, pero donde las vértebras están rectas: esto se debe a una mala postura.
La escoliosis es una patología que aparece con frecuencia durante la adolescencia, en el momento del crecimiento. A consecuencia de la ampliación de las estructuras óseas a esta edad puede evolucionar de forma relativamente rápida, de ahí la importancia de un diagnóstico precoz. La escoliosis no sólo puede ser primitiva, espontánea, sino también secundaria a otra patología que debe ser investigada.
La escoliosis es visible y se manifiesta en primer lugar por una mala postura tanto sentado como de pié, con una impresión de desviación del eje del cuerpo. Según el tipo de escoliosis, pueden aparecer dolores dorsales de origen óseo y también muscular. En el marco de una escoliosis, la columna vertebral toma la forma de una S o de una C.
Para diagnosticar la escoliosis, el médico realizará un examen físico, centrándose no sólo en la espalda, en la columna vertebral, sino también en la pelvis y en las piernas. Si se trata simplemente de una actitud escoliótica, no se requiere ningún exámen complementario. En caso de duda, se practica una radiografía de la columna vertebral. En algunos casos puede ser necesaria una radiografía de la pelvis, un escáner, una RMN o incluso una gammagrafía cuando existan dudas clínicas o radiológicas sobre la escoliosis secundaria a otra enfermedad.
El tratamiento de la escoliosis depende de su gravedad y de su evolución. La escoliosis leve se puede tratar con:
La escoliosis secundaria requiere tratamiento específico de la enfermedad identificada.
Las escoliosis importantes que no han respondido al tratamiento convencional a veces pueden ser tratadas con cirugía.
Prevenir la escoliosis es posible. Para ello, es importante cuidar la espalda. Para evitar la escoliosis, es esencial: