La sangre de cordón umbilical es la sangre que queda en el cordón umbilical tras el parto. En la mayoría de los partos, el cordón umbilical y la sangre que contiene son desechados. La sangre que queda en el cordón umbilical es muy rica en células madre, especializadas en la renovación de las células sanguíneas y utilizadas para regenerar la médula ósea de pacientes enfermos.Las células madre obtenidas de la sangre del cordón umbilical tienen muchas ventajas frente a las que se obtienen de la médula ósea.
Gracias al trasplante de células madre se han tratado, con éxito, determinados tipos de leucemias, el linfoma de tipo no-Hodgkin's, el mieloma múltiple, el neuroblastoma, la osteoporosis, anemias congénitas, inmunodeficiencia combinada severa, lupus y otras muchas.
De la recolección y transporte de la sangre extraída del cordón umbilical se encarga la maternidad; no todas las maternidades tienen los medios necesarios para ello. Por eso es importante informarse antes del parto. Del almacenamiento de las células madre extraídas del cordón umbilical se encargan los Bancos de Cordón Umbilical. En España existen bancos públicos y bancos privados de células madre.
Aun siendo células madre adultas, las características especiales de las células madre de la sangre extraída del cordón umbilical las hacen más versátiles (es más fácil que se conviertan en otros tipos de células o tejidos) y tienen más capacidad de proliferación (se necesitan menos células para regenerar un órgano) que las que se encuentran en la médula ósea. Su versatilidad parece demostrada respecto a la generación de células del tejido cardíaco, nervioso y células hepáticas.
1.- Permiten ahorrar tiempo en la búsqueda de un donante compatible, ya que se encuentran almacenadas en un banco y catalogadas según los tipos.
2.- Las células madre del cordón umbilical, debido a su inmadurez inmunológica, toleran mejor la disparidad entre donante y receptor: gracias a este hecho el riesgo de rechazo es menor. Las células madre obtenidas de la médula ósea tienen que ser 100% compatibles para su trasplante, mientras que las del cordón umbilical no.
3.- Hay virus que se encuentran muy extendidos en la población general (como el herpes) y que no están presentes en estas células porque no han sido expuestas a ellos.
4.- Son una fuente económicamente accesible y fácilmente disponible de células para trasplante, ya que su extracción es menos costosa que la de las células de origen medular o la de la sangre de los adultos.
5.- Esta técnica evita tener que extraer la médula ósea del donante para lo que se requiere una intervención quirúrgica.
6.- La capacidad de autorreplicación (es decir, tienen mayor capacidad de proliferación) es mayor que las de la médula ósea, y es tan apta como ésta para injertarse y regenerar el órgano completo. Esto es importante porque se requiere un número mínimo de células madre para el éxito del tratamiento, número que a veces no está disponible sin acudir a las técnicas de autorreplicación.
Todavía los resultados son poco concluyentes pero se están realizando investigaciones sobre su futura aplicación en el tratamiento de la diabetes, la enfermedad de Alzheimer, el Parkinson, el cáncer, el SIDA, las enfermedades degenerativas como la artrosis y otras donde sea necesario regenerar parte del órgano afectado, como es el caso del infarto de miocardio.
Sin embargo, las expectativas de la medicina regenerativa están aún muy lejos y en la actualidad, la eficacia de la sangre del cordón umbilical se circunscribe a pacientes que padecen una enfermedad de la médula ósea como las leucemias.