Una pericarditis infecciosa es una inflamación del pericardio (membrana que envuelve el músculo cardíaco) de origen infeccioso. A menudo se trata de pericarditis aguda (de poca duración), poco graves y causadas por un virus (pericarditis virales). Aparecen a menudo después de una gripe. Con menos frecuencia son de origen bacteriano: pericarditis tuberculosas, pericarditis septicémicas...También existen algunos casos excepcionales de pericarditis causadas por parásitos tipo micosis. La pericarditis infecciosa cursa con un fuerte dolor torácico, que se incrementa en posición estirado, al inspirar profundamente, tragando y tosiendo. A menudo el paciente tiene fiebre. El tratamiento depende de la causa: antiinflamatorios no esteroideos, analgésicos, corticoides, antituberculosos, etc.