Temesta es un medicamento utilizado para tratar cuadros graves de ansiedad. Este medicamento también es prescrito para el tratamiento del delirium tremens, una afección asociada a la abstinencia después de un alcoholismo crónico y que se manifiesta por fiebre, agitación y temblores.
Temesta se comercializa en comprimidos que deben ser ingeridos por vía oral.
Este medicamento es prescrito a personas muy ansiosas que presentan síntomas que pueden llegar a causar discapacidad. Este medicamento también es suministrado para tratar el delirium tremens y otros síntomas asociados al alcoholismo. La dosis inicial recomendada es de 2 comprimidos de 1 mg por día (2 mg en total) que deben ser ingeridos en tres tomas: ½ comprimido por la mañana, ½ comprimido al mediodía y ½ comprimido por la noche. Después de algunos días, la dosis diaria puede aumentar a 3 o 4 comprimidos.
Temesta está contraindicado en personas con hipersensibilidad a su principio activo (lorazepam) o a otras sustancias presentes en su composición. Tampoco se debe utilizar en aquellos que padecen de insuficiencia hepática o insuficiencia respiratoria graves. Del mismo modo, Temesta no debe ser suministrado a personas con apnea del sueño (disminución o interrupción de la respiración durante el sueño) o con miastenia (enfermedad que afecta la comunicación entre las neuronas y los músculos).
Por último, no debe ser prescrito a niños.
El consumo de Temesta puede provocar efectos colaterales: somnolencia, confusión, hipotonía, ataxia, fatiga, reacciones cutáneas (picor, brotes), náuseas, estreñimiento, alteración del deseo sexual e hipotensión. Estos efectos están directamente relacionados con la dosis suministrada y con el nivel de tolerancia del paciente.
Existe un riesgo de dependencia física y psíquica. Sin embargo, este riesgo está presente principalmente en pacientes que consumen dosis altas por un período prolongado.