La faringe es un tubo muscular anular formado por mucosa tanto de tipo muscular como adventicia, que constituye la parte inicial y más alta de los aparatos respiratorio y digestivo. Actúa como un conducto para el paso del aire, de los alimentos y de los líquidos que se extiende desde la base del cráneo hasta el esófago. En el hombre mide unos trece centímetros y se sitúa delante de la columna vertebral. Existen un conjunto de pruebas que se utilizan para valorar el estado físico y funcional de la faringe.
Se realiza para detectar una posible hipertrofia de las amígdalas, desarrollo de vegetaciones, la localización de posibles puntos dolorosos debido a procesos inflamatorios, etc. Se pueden utilizar varias técnicas.
Es una técnica poco invasiva. A través de un especulum nasal o rinoscopio, que se introduce a través del orificio nasal, nos permite valorar el aspecto de la mucosa faríngea y de las secreciones nasales: cantidad, fluidez o espesor y color.
Técnica poco invasiva. Permite mediante una pequeña cámara que se introduce por la nariz observar toda la cavidad desde el mismo orificio nasal hasta el final; zona que comunica a su vez con la garganta o cavum. Se realiza mediante un rinofibroscopio, que puede ser flexible y entonces se denomina fibroscopia. Cuando es rígido se denomina telescopia.
Es una técnica poco invasiva y ligeramente incómoda para el paciente, que permite mediante una pequeña cámara que se introduce por la nariz observar toda la cavidad, desde el mismo orificio nasal hasta la laringe. Se realiza mediante un rinofibrolaringoscopio que consta de una parte flexible, que es la que se introduce para realizar la exploración. Esta técnica permite la obtención de exudados faríngeos y biopsias con el fin de diagnosticar el microorganismo responsable de la infección, o también si se sospecha de la existencia de un tumor.
Esta prueba se utiliza para diagnosticar la existencia o no de vegetaciones adenoideas.
Esta prueba se solicita para descartar la existencia de patología tumoral.
Es un procedimiento "no invasivo" que utiliza imanes y ondas de radio potentes. Las imágenes por resonancia magnética permiten establecer la diferencia entre diversos órganos, ya que ofrecen la posibilidad de mostrar un contraste entre tejidos benignos y malignos.