La enfermedad de Hashimoto, o tiroiditis de Hashimoto, es una enfermedad autoinmune, es decir, causada por el ataque de los anticuerpos del organismo hacia sus propias células. Los autoanticuerpos, mantenidos por una anormalidad en la tolerancia del sistema de defensa del cuerpo, atacan a la glándula tiroides y causan la destrucción progresiva de las células de la tiroides. Inicialmente, la tiroides compensa el ataque aumentando su actividad, pero la lisis (destrucción) de las células conduce a una disminución en el volumen de la glándula y a una deficiencia hormonal.
Esta enfermedad afecta principalmente a las mujeres adultas, a menudo entre 40 y 60 años.
Los síntomas de la enfermedad de Hashimoto son:
Para el diagnóstico se necesitan una serie de pruebas incluyendo:
Otras pruebas también se pueden realizar en función de los síntomas que aparezcan con el fin de evaluar el impacto de la enfermedad en otros órganos.
El tratamiento va a depender de la fase pero después de un corto período de hipertiroidismo va a consistir en la administración de un tratamiento de sustitución hormonal con hormonas tiroideas de síntesis cuando un hipotiroidismo aparece asociado con la enfermedad de Hashimoto. Este tratamiento del hipotiroidismo se dará de por vida. Además, los controles regulares son necesarios para evaluar el buen equilibrio proporcionado por el reemplazo hormonal.