La enfermedad de Addison es una enfermedad endocrina, es decir, relacionada con una glándula endocrina que secreta hormonas. Se trata de una insuficiencia suprarrenal crónica. Esto significa que las glándulas suprarrenales no secretan bastantes hormonas, lo que provoca su déficit y los síntomas clínicos correspondientes. La glándula suprarrenal secreta principalmente dos tipos de hormonas: los glucocorticoides (por estimulación de la hipófisis) y los mineralcorticoides (especialmente la aldosterona). Históricamente, la enfermedad de Addison era un término que se aplicaba a la afectación por la tuberculosis de las glándulas suprarrenales; actualmente este término reagrupa todas las causas de insuficiencia suprarrenales crónicas periféricas. Las llamamos periféricas porque se distinguen dos tipos de disminución en el funcionamiento de la suprarrenal: en el primer caso, la lesión se sitúa a nivel central, es decir, a nivel de la hipófisis (que se localiza en el cerebro) que no estimula correctamente la suprarrenal: en este caso hablamos más bien de insuficiencia corticotropica ya que las únicas hormonas deficientes son las derivadas del cortisol. En el segundo caso la anomalía es periférica y es la glándula suprarrenal directamente la que está afectada: en este caso está afectada su secreción de hormonas derivadas del cortisol y también los mineralcorticoides. Esta distinción es importante, tanto para el diagnóstico clínico como para el tratamiento.
Así, la enfermedad de Addison o insuficiencia suprarrenal crónica, puede ser principalmente debida a la tuberculosis (cada vez más rara) o más frecuentemente a una enfermedad autoinmune llamada retracción cortical autoinmune. También pueden ser responsables algunas enfermedades genéticas, enfermedades inducidas por drogas, un cáncer suprarrenal, una hemorragia o una infección.
Los síntomas comunes de la enfermedad son:
El diagnóstico se realiza a través de los análisis de sangre:
Algunas pruebas adicionales se añaden para a determinar la causa de la enfermedad:
Para paliar el déficit hormonal se administra al paciente moléculas de síntesis, a la vez un mineralocorticoide y un glucocorticoide. El tratamiento de la enfermedad de Addison también requiere una "educación" del paciente, ya que esta enfermedad puede ser grave en algunas ocasiones si no se siguen determinadas instrucciones: el tratamiento se debe tomar con cuidado, la comida no debe excluir la sal y ningún fármaco debe ser consumido sin la aprobación del médico. Debe haber unos síntomas de referencia que el paciente debe conocer y le deben obligar a consultar con el médico rapidamente: fiebre, dolor abdominal o vómitos, pérdida del conocimiento ...