Las adenoides son dos pequeñas glándulas compuestas por tejido linfoide, semejantes a las amígdalas y a los linfonodos. Nacemos con dos adenoides que están localizadas en el punto más posterior de la garganta, específicamente en la región de la nasofaringe. Al contrario de las amígdalas, no es posible ver las adenoides al abrir la boca, pues están encima del paladar (cielo de la boca).
Así como las amígdalas y otros linfonodos, las adenoides tienen como función la producción de linfocitos y anticuerpos.
Por lo tanto ayudan al organismo a defenderse de los microorganismos que invaden las cavidades nasal y bucal.
Sin embargo, las adenoides no son esenciales y su retirada quirúrgica no parece causar ningún problema en el sistema inmunológico del paciente.
Habitualmente, las adenoides se forman en el séptimo mes de vida del feto. Continuan su crecimiento hasta aproximadamente los 5-6 años de edad. A partir de los 8-10 años las adenoides comienzan a retroceder, desapareciendo totalmente hasta la vida adulta.
Las adenoides de tamaño normal no provocan ningún síntoma y desaparecen en la adolescencia sin provocar problemas.
Sin embargo en algunos niños con infecciones respiratorias de repetición las adenoides pueden crecer e hipertrofiarse provocando problemas.
Las adenoides hipertrofiadas pueden provocar:
Las dificultades respiratorias son más frecuentes por la noche pues cuando dormimos nuestra musculatura se relaja y aumenta así la obstrucción de las vías aéreas por las adenoides hipertrofiadas. Los niños con adenoides grandes pueden tener:
apneas nocturnas.
Al dormir mal el niño pasa el día irritado, cansado y somnoliento.
La hipertrofia de las adenoides hacen que los niños respiren siemprepor la boca: esto provoca alteraciones en la anatomía del rostro y de los dientes, provocando una apariencia llamada facies adenoidea.
Los niños con facies adenoidea característicamente poseen un rostro alargado, dientes incisivos prominentes, dientes agrupados, mandíbula poco desarrollada, labio superior corto, orificios nasales elevados y un paladar arqueado.
El único tratamiento para las adenoides grandes es la cirugía: la llamamos adenoidectomía. Como las adenoides disminuyen espontáneamente con el tiempo, la indicación de la cirugía tiene que ser bien hecha, pesando los riesgos quirúrgicos con las complicaciones causadas por la obstrucción de las vías aéreas.
La cirugía para la extirpación de las adenoides generalmente se indica en niños con obstrucción grave de las vías respiratorias, principalmente en aquellos de 3-4 años con dificultades para dormir, con otitis media y/o sinusitis de repetición. En los cuadros más leves el tratamiento se lleva a cabo con antibióticos y corticoides durante las crisis (amigdalitis/adenoiditis), sin que se indique la cirugía.