La acción del DIU es inmediata a su colocación. De todos modos, se recomienda un período de inactividad sexual, para permitir que el útero se desinflame y evitar que se mueva de su lugar de implantación. El dispositivo no protege contra las enfermedades de transmisión sexual (ETS), al contrario, aumenta el riesgo de contraerlas ya que favorece las inflamaciones de la pelvis.
El DIU es un método anticonceptivo de alta eficacia, su tasa de fallo típica es de un 1-2 %. Esto significa que de 100 mujeres que lo usan solo quedarán embarazadas entre 1 y 2 al año. El DIU de COBRE es 99% efectivo, mientras que el DIU de progesterona tiene un porcentaje de efectividad del 98-99%. Su eficacia es inferior al de las píldoras anticonceptivas, sin embargo, es considerado una forma muy efectiva de control de la natalidad
Las tasas de fallo de los DIUs son más bajas en mujeres por encima de los 30 años de edad. Para una efectividad de casi el 100% se recomienda asociar el DIU con el uso de espermicidas o de condones durante el período fértil de la mujer. Asimismo es recomendable utilizar algún método complementario de control de natalidad durante los 3 primeros meses después de la inserción.
El dispositivo bien colocado no debe sentirse, aunque durante el acto sexual, la pareja puede llegar a sentir el hilo del dispositivo. Algunas mujeres que utilizan esta forma de anticoncepción pueden experimentar cólicos, un incremento del sangrado menstrual, dolores menstruales. También puede haber un mayor riesgo de contraer una enfermedad inflamatoria pelviana. En casos excepcionales se puede lastimar el útero en el momento de la colocación del dispositivo
El mayor inconveniente del DIU es su alta tasa de expulsión. Se presenta habitualmente durante los primeros tres meses después de la inserción y ocurre más frecuentemente durante la menstruación. Esto se explica porque el cuerpo femenino tiene una tendencia natural a expulsar objetos extraños.
Durante un año de uso, entre un 2% y un 20% de mujeres que llevan DIUs, los habrán expulsado, a veces de manera inadvertida. Estas mujeres pueden embarazarse si no son conscientes de que han expulsado el DIU.
Los DIUs de cobre o progesterona parece que se expulsan menos que otros modelos. Se recomienda comprobar la longitud de los hilos algunas veces al mes, especialmente después de la menstruación. Deben realizarse controles periódicos después de colocarse un DIU para verificar su posición correcta y su buen funcionamiento.
La aparición de un sangrado vaginal en momentos no esperados del ciclo, los calambres o dolor abdominal son síntomas que nos pueden advertir que el DIU está siendo expulsado. Otro signo es la percepción de los hilos más largos o palpar el DIU en el cuello del útero o en la vagina. También es posible que cuando el DIU está siendo expulsado, el compañero sexual sienta dolor o irritación durante el coito.
El DIU puede dañar la fertilidad y ser causa de esterilidad en algunas ocasiones. Cuando una mujer quiere insertarse un DIU debe ser advertida de estos posibles efectos o complicaciones. El DIU puede provocar complicaciones como la enfermedad inflamatoria pélvica, una perforación uterina, el empotramiento en la pared del útero o un embarazo extrauterino.
Si la mujer no ha presentado ningún problema mientras he llevado puesto el DIU su posibilidad de quedar embarazada después de que se extraiga el mismo, es probablemente idéntica a la que tenía antes de usarlo (aunque existe alguna controversia sobre esto).
Los dispositivos de cobre deben cambiarse cada cuatro años, aunque algunos estudios demuestran que son efectivos al menos durante cinco años. Los DIUs de progesterona deben ser recambiados cada año porque la liberación de la misma por el dispositivo se agota a los 12 meses.
El DIU previene el embarazo deteniendo el esperma para que no fecunde el óvulo eliminado por el ovario. No permite que el esperma entre en contacto con el óvulo. Modifica el endometrio del útero de forma tal que el huevo fecundado no puede implantarse. Así, el huevo no tiene lugar donde crecer.
El riesgo de quedar embarazada con el DIU colocado es muy bajo. Esta posibilidad existe ya que el DIU no tiene el 100% de seguridad. Si una mujer queda embarazada con el DIU colocado éste debe ser removido inmediatamente. También debe comprobarse de que no exista un embarazo ectópico especialmente si el DIU es de progesterona. En caso de no extraer el DIU las posibilidades de que se genere un aborto son del 50%
Durante el tercer trimestre el peligro de perder al bebé es 10 veces mayor de lo normal. Se debe tener en cuenta que la remoción del DIU provoca un 25% de probabilidades d[/faq/8547-dolor-abdominal-izquierdo-definicion e pérdida del []/faq/9286-feto-definicion feto] y en caso de llegar con el embarazo a térmi[/faq/2290-micosis-vaginal-es-necesario-tratar-a-la-pareja no, se puede gen]erar un parto prematuro, un bebé de bajo peso o muerte fetal en el útero.
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